Con sinceridad

domingo, 18 de marzo de 2012

Soy adicta a la Oxitocina,disculpame por ello.

Intentare excusarme.

Veinte años y una situación por cada día de esos veinte años hacen mella y es algo que esta claro, nos esculpe y no siempre lo hace bien. me gustaría decir que soy una gran persona , pero en este preciso momento no estoy segura de ello.

¿Como eximirme por lo que hago?
Te diré jamas un fui ser fantástico haciendo las cosas y que no era oportuna, es por eso por lo que día a día mantengo el autocontrol de lo que digo o lo que pienso para no hacer mal alguno ni incomodar a alguien, reprimiré lo que siento hasta que explote, y he explotado.

No es una catástrofe, no he dañado a nadie de una manera irrecuperable pero he hecho lo suficiente para sentirme mal y arrepentirme. Deja te llevar y obtendrás las consecuencias de ello y la mayor parte de las veces no serán buenas.

Me siento sucia y ahogada por opiniones que a lo mejor ni siquiera existen, me destruyen. Para mi es importante, es como un juicio en el que me acusa un dios superior diciendo me que lo hago mal y sin castigo alguno con el que pueda enmendar mis errores me abandona a mi suerte con la única compañía de unos pensamientos que me corrompen, me dejara allí y con el tiempo me reare y esa cicatrización duele más que nada en el mundo.


Lo hago mal, se que siempre lo hago mal pero da me unos días o unos años y seré mejor.

¿Pero que he hecho?

Dejarme llevar por el placer, por sus dedos en mi piel, por la adicción a la oxitocina, por el escalofrío y la carne de gallina que viene después, las manos frías en mi espalda, el sabor de la saliva, el deseo de ser deseada , la música en mi sien, las curvas en su brazos, el blanco reluciente en sus dientes,sus múltiples formas de andar, sus enorme ojos, su manera de bailar. 

Dividido entre tres, es un error como una catedral de grande.

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